miércoles, 14 de noviembre de 2012

descripción de dos personajes de la obra "melancolía" de Durero


El ángel pensativo
Este personaje ocupa casi en 40% de la obra en posición diagonal abajo. Se observa a un hombre con las características de un ángel  con las alas recogidas y vestido de traje largo hasta los pies, sentado con expresión pensativa sosteniendo su cabeza con la mano derecha. En su cabeza sostiene una corona hecha de remos de hojas, en su mano izquierda sostiene un compás y un libro, y en su cintura sosteniendo un bolso pequeño y un puñado de llaves.
Los ángeles son símbolos de protección y mensajería basados en los relatos judeocristianos tratándolos como seres de luz creados por Dios en el paraíso.

El cordero recostado
A la derecha del ángel pensativo, por encima de la bola y de los instrumentos de carpintería y debajo de la figura geométrica se encuentra un cordero recostado, sin pelaje y en posición fetal con aspecto desnutrido y sufriente.
Los corderos son simbolizados como el sacrificio, la expiación y el perdón, en la cultura judía antes de Cristo utilizaban un cordero recién nacido sin ningún defecto físico para ser sacrificado ante el tabernáculo donde se presenta la presencia de Dios por el perdón de los pecados, así mismo Jesucristo es simbolizado como el cordero de Dios convirtiendo al cordero como una de las representaciones más famosas del cristianismo.



2 comentarios:

  1. expreso de nuevo la preocupación por la fuente de la imagen; mas destaco que hay un problema que no es del autor, sino de la exigencia de la clase, pues la relación del texto con la imagen nunca resultará claro para los lectores regulares de la red, ademas de deslindarse por completo del tema, que mas que un tema, es un compromiso de cara al desarrollo de un blog.
    en síntesis, como ejercicio de clase funciona, pero es inconsecuente con el entorno expuesto y con el tema.

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  2. Como sugiere el compañero Cristian Parra, es recurrrente la falta de las fuentes para referirse tanto a la imagen, como al análisis de la misma;es importante para el lector, no solo vincularse con la imagen, si no encontrarse en el texto; el texto que acompaña la imagen debe ser herramienta para acercarse a esta, y como sugerencia, tener cuidado con el tamaño de la letra,o por lo menos otorgar la diferenciación entre lo mismo, debido a que en el autor pueden presentarse confusiones, llegando quizá a asumir (como pudo suceder en mi caso) que el texto es traído desde otra fuente, sin que esta reciba los créditos meritorios.

    Rubén Alarcón

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